Carta de presentación: verdad

Cuando me toca hablar de amor, casi siempre termino hablando como una mujer. A no enojarse, pero, es como que quiero lo que ellas quieren: una relación formal, casarse y en el futuro ser felices con los hijos y demás (no se si será el jabón que uso o que).

Hice esa introducción para contar que hay varias ideas que siempre rondan en la cabeza como objetivos principales dentro de la relación de pareja, pero la verdad, en el transcurso de la convivencia, van apareciendo comportamientos que hay que negociar y que a veces forman parte del backstage de una vida de a dos.

Cuando uno va conociendo a su pareja va sabiendo que le gusta y que no. Como dije más arriba, se va negociando. Lo que sí, desde el comienzo parece que existen cosas que no te van a gustar nunca pese a querer tratarlo.

Por otra parte, están también los temas que sí a uno le toca ceder. Ya cada uno sabrá si accede o no a todo eso. Pero, días pasados una situación me hizo analizar bastante:

Un amigo me dijo que al estar casado, si justo terminás de trabajar antes de lo previsto, mejor nomás ir a otro lado y esperar el horario de siempre para aparecer en tu casa para no tener problemas. Porque ese "estar al pedo lo que le molesta a tu señora". ¿Será posible que lo de "una mentira que te haga feliz" existe?

Y mi amigo siguió. "Vos pensás que yo le conté cuando me fui a ver el partido la vez pasada a tu casa. Yo le llegaba a decir que estaba en tu casa y no me hablaba más. Me iba a preguntar por qué no estaba ahí con ella".

Particularmente odio la mentira. Quizás por eso siempre reacciono muy mal cuando soy víctima de una de ellas. ¿No será que ya se falló al comienzo, al no mostrar cómo uno es?

Si hoy estás conociendo a alguien, no mientas. Decí la verdad y mostrate tal cual sos. Por ahí uno cuida todos los detalles porque la ley de "la primera impresión es la que cuenta" siempre está y se apuesta al marketing personal. Pero, el decir una verdad, te puede ahorrar muchos problemas. Mucho más que cuando tengas que mentir en el mañana por no haberte presentado como se debe.

Hay que negociar siempre, cierto. Pero nada mejor que la verdad desde el día cero. Ya verás el resultado.



Aprovecho para recordar estas canciones:

Spandau Ballet - True (romántico e ideal)

Good Charlotte - The truth (viene al caso)

Depeche Mode - Policy of truth (temazo)